Leather en el cine, de lo íntimo y lo privado


A lo largo de la historia del cine, los hombres solos, acostumbrados a buscar en esas enormes salas un contacto íntimo entre ellos y la pantalla, dedicados a contemplar una historia, no hacían a un lado que hubiera en algún momento una persona sentada al lado interesada en establecer contacto, las condiciones para un encuentro eran favorables, se imponía el silencio, concentración en lo que se mostraba, la complicidad de fingir que se estaba asistiendo a la sala a ver la película mientras el espacio, un cine, se convertía en el sitio más recurrido en una ciudad para buscar algo de homoerotismo, en cierto modo más público y al mismo tiempo más seguro.


Fue con la propia invención del cine que inmediatamente el cine para adultos, la pornografía, la clase “B” y otras temáticas tomadas de la vida clandestina hicieron su aparición. En algún momento el hacer cine, un arte, era el lugar idóneo para dejar salir pasiones e ideas subconscientes, antes de la década de 1930 y el ascenso de los totalitarismos no hubo tema que no se tratara dentro de la pantalla de plata, tras grandes y fastuosos escenarios, estrellas de primera y el avance del sonido, eran esas películas menores, basadas en dramas de la gente de los medio bajos, donde habría de ir naciendo un interés por la “otredad”, mujeres y hombres con vidas nocturnas, pensamientos amorales, deseo de sobrevivir día a día, por no conocer otra forma de hacerlo, las relaciones entre hombres, el tema que nos interesa, estaba de pronto en las temáticas buscadas.

En una forma escondida, la vida sexual como tabú y una constante vigilancia en convertir las formas en arquetipos reconocibles, aparecen filmes en que los hombres son compañeros, amigos, conocidos y hasta parejas (en un sentido de dar por hecho y no de señalar un toque de homosexualidad en el mismo), en los años 40, tras años de musicales y películas llenas de patriotismo apenas termina la guerra aparece la primera construcción de una relación entre hombres, el contexto de cómo se conocen un tahúr y un empresario sin escrúpulos en un sitio de marinos, malvivientes, ladronzuelos y hombres sin suerte, Glen Ford apuesta en los embarcaderos del puerto de Buenos Aires, gana con trampas y antes de ser asesinado por un inconforme una daga sale de un bastón de un elegante caballero, un alemán, que se divierte de conocer a Johnny, el nombre del tahúr, entablando una relación de compañeros, sellando un pacto y acordando que no habría mujeres de por medio, Johnny se vuelve la mano derecha del alemán, éste confía en el hombre que no tiene pasado “nací ayer, cuando nos conocimos”, de ahí su relación, sin pasado no puede haber deseo de traición, a esta pareja unida por el beneficio mutuo viene a darle otro sentido cuando aparece Gilda (Gilda, 1946), Rita Hayworth, la nueva esposa del alemán, mujer sin escrúpulos que al reconocer en Johnny a su ex amante y él encontrar a la mujer que le hizo olvidarse de las mujeres el duelo entre ellos se convierte en un arma, Johnny cuida de que ella no se deje ver tal y como es ante el alemán y éste le confía a su mujer como otro objeto más de sus posesiones, “es solo un muchachito” dice Gilda despectivamente ante la aparición de las dudas de parte del esposo que cree, o aparenta, todo lo que Johnny dice y es respaldado por Gilda por mera diversión, pues espera ver hasta donde puede llegar Johnny en su supervivencia en la relación con su socio,en un lenguaje sutil, un homosexual ve una relación de dos hombres donde no aparece nada de sexualidad pero sí de seducción, donde un heterosexual ve una historia amoral de cine negro.

Con el desarrollo del medio Underground durante los años 50 y 60, el lugar adecuado para los nuevos tipos de hombres estaban en el cine realista, en una denuncia que intenta explicar una generación que criticaba a lo establecido aparece Marlon Brando, enfundado en su chaqueta de cuero negra, gorra y guantes, subido a una motocicleta y en una silenciosa pero orgullosa mirada nos presenta El Salvaje (The Wild One, 1953), el hombre que cree en la otra vida, fuera de los cánones sociales, de los inadaptados que volvieron decepcionados de la guerra de Corea, leales solo a ellos mismos. Paralelamente un joven de mirada tierna nos tenía a otro tipo de hombre que buscaba bastarse a sí mismo, James Dean, en Rebelde sin Causa (Rebel Without a Cause, 1955), deja un huella imborrable, su muerte deja su carrera en el clímax, pero su imagen quedaba viva en que valía la pena correr riesgos.

Inglaterra, devastada, herida y desfigurada tras la guerra, pagó un precio enorme, una juventud huérfana, que creció entre bombas y ruinas, ostentosa de su victoria que marcó a toda una generación, nació entre esas ruinas el Rock como cultura, la postura de una actitud de rebeldía y desapego, The Leather Boys (1964)culminaría otra era, una relación abiertamente homosexual pero no basada en los cánones de la pareja heterosexual, algo muy recurrido en el cine norteamericano de esos tiempos buscando algo de comprensión para los hombres homosexuales de entonces, la lealtad, la fraternidad, el compañerismo y demás reglas de los cuerpos militares tomaban el lugar de los celos, los sentimentalismos y las crisis en la pareja, sin expresar la violencia que estaba presente, era la distancia de los encuentros casuales la respuesta sana antes de caer en estereotipos de relaciones hombre-mujer.

La Revolución Sexual de los años 60 tenía su lugar para los hombres homosexuales, aparecía un tipo de hombre que dejaba a un lado la modestia y la clandestinidad de la actitud masculina por un fetichismo homoerótico donde el hombre, parecido a la nueva mujer de la Liberación Femenina, era su propio objeto de deseo, tomaba el poder de la seducción para sí y se abría una sexualidad nueva, el cine pornográfico extendía sus espacios, primero como escenas muy escondidas dentro de películas heterosexuales de adultos y un posterior nuevo rubro de películas de escenas homoeróticas, incluyendo sus propios horarios, para solitarios, que daban origen a los cines para hombres. En este ambiente aparece Peter Berlin, alemán de origen aristócrata que llama la atención por su espectacularidad, en una era en que solo las Drag Queens, herederas del espectáculo de cabaret, eran los centros de atención y la imagen del hombre homosexual, es Berlin quien toma al hombre de cuero, el excombatiente, el hombre rudo y a la vez callado que sabía lo que buscaba y lo traspasa a la las calles de San Francisco, el hombre Leather de Peter Berlin es, al fin, un hombre libre y no solo un deseo, con Nights in Black Leather (1973) y That Boy (1974), sus únicas cintas porno, el hombre se vuelve leyenda al ser el fetiche de muchos y empezando a marcar la línea divisoria entre el homosexual Leather y el gay de los años 70.

En un medio tan escondido como era el de los encuentros entre hombres, era fácil especular, si el hombre homosexual era un inadaptado, tendría entonces que ser seguidor de bajas pasiones, descubridor de una actitud de defensa antes de ser atacado y en donde, algunos con cierta educación, tendrían una actitud de culpa, pasión y entrega donde no se mediaran los puntos medios, en este mundo que para la sociedad era algo que se le daba la espalda aparece un tema común, hombres que eran asesinados en hoteles, callejones o tirados a los ríos, clasificados como crímenes pasionales y por tanto sin importar buscarles una solución, aparece (Cruising, 1980), una novela que se vuelve película con Al Pacino, un policía encubierto en el Underground Leather buscando a un asesino de homosexuales, la idea era una denuncia y aparte una sensibilización de que para inicios de la década de los 80 los hombres homosexuales no solo eran los que asumían la postura retadora del gay abierto e irreverente, sino que la revolución silenciosa, con su actitud de un sexo más profundo y otras formas de relacionarse entre hombres, estaba presente desde tres décadas antes al menos como movimiento, el entonces conocido como medio gay no aceptó esa imagen y protestó, entregando una buena parte del Underground al escrutinio público pero formando una nueva línea de caracterización, la sociedad ya no vería al homosexual como el hombre que busca ser mujer victimizado por sí mismo, sino como a otro hombre que tenía el mismo lugar que el resto de las personas en la sociedad, su vida clandestina era ahora, como en todo punto del derecho, un asunto privado.


Buscar un cine para un encuentro es algo ilógico en la mentalidad del siglo XXI donde toda postura de denuncia es algo que se lleva al terreno de la intimidad y “lo que no afecta a un tercero no es de interés de nadie más”, aún así, existen esas escenas que invitan a pensar en ese “algo más”, que devuelven el sentido de intimidad de que solo está el espectador y la pantalla que le habla solo a él, metido en sus pensamientos mientras, casualmente, una mano busca entre sus pantalones a la otra mano que está buscando ese encuentro.


Continuará en “el cine que nos hace sentir”


Gerardo Spíndola

Comunidad Leather México

Moderador


comunidadleathermexico@gmail.com

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Revista Pink, enero 2011, páginas 16 y 17

Orgullo Leather


Nunca he podido estar totalmente de acuerdo con el término de Los Hombres de Cuero para definir a los Leather, aunque la traducción es precisamente esa siempre he sentido que Leather se ha ganado su existencia tal y como está para definir a esta cultura que es parte de la Diversidad. Cuando un hombre Leather viaja a otros lados, busca un evento en especial, como Folsom Street, Market o algún otro, decide visitar un bar que admite el Código de Vestuario o simplemente se hace presente en alguna Marcha o Manifestación por el Orgullo Gay siempre se distingue. Ante el resto de la Diversidad la gente los ve como otro más de esos hombres que andan en cuero y que parecen vivir en un mundo aparte, entre los mismo Leather de un lugar lo reciben y le recuerdan que el Leather es universal, tal vez interpretado en un contexto diferente o solo visto desde un punto determinado, como las prácticas, el protocolo, las sesiones o el fetichismo; pero siempre en un trato de camaradería y respeto.


El conservar las reglas y protocolos que hace 60 años dieron nacimiento a la Vieja Guardia, cosa que ahora son un montón de buenos propósitos y que dieron origen al Código del Buen Leather, marcan una distinción sutil pero básica entre los hombres que gustan de los hombres en una relación de iguales y los hombres que establecen relaciones distintas con otros, para el Leather la relación con el otro se hace notar con un trato de igualdad en condiciones, capacidades y necesidades; lo cual ahorra muchas palabras y prepara el momento adecuado para que se establezca una relación de caballeros, el Código tal y como se le conoce establece cuatro simples principios: el Honor, la Integridad, el Compromiso y la Templanza, cosas que para muchos son algo que nos hace parecer cuadrados, muy organizados e incluso aburridos ante el carácter festivo que se ha tomado como sinónimo de gay, al equipararlo con la homosexualidad masculina, un Leather se considera gay en el principio del Orgullo, algo que nació con el propio movimiento en 1970 al conmemorar lo sucedido en Stonewall un año antes.

El Orgullo Leather nace de querer conservar la distinción de los hombres que fueron a la guerra y que volvieron buscando esa fraternidad, que se empezaron a reunir alrededor de las cantinas de barrios industriales, zonas marginales, bares de motociclistas y sitios de carretera, que tomaron para sí los puertos donde llegaban marinos, militares, policías que se mezclaban con obreros, trabajadores y cargadores; cuando llegaron los huérfanos de guerra buscando una imagen masculina a la cual seguir adoptaron a estos padres que le dieron forma a la Vieja Guardia, tomaron los uniformes como medio de identificación y los neutralizaron al pasar al uso de la mezclilla y el cuero, al adoptar el color negro de las chamarras de aviador y las gorras, no es raro que la nomenclatura militar fuera tomada por estos grupos iniciales, Ángeles del Infierno, Cruz de Hierro, Batallón o Compañía, tampoco que la designación entre los miembros se librara de jerarquías y se quedara en Hermandad, Fraternidad, Banda de Hermanos, Grupo, Comunidad y que los títulos, ganados siempre por el respeto al conocimiento y la práctica, se antepusieran a los nombres, Señor, chico, soldado o Papi.

Fue la búsqueda del entendimiento entre hombres en lo emocional que las prácticas relacionadas al Sadomasoquismo se tomaran como formas de entenderse sexualmente, sin términos para definirlas y sin la seguridad de que se pudiera hablar libremente de lo que se quería hacer por gusto o curiosidad, alejando también la relación coital por considerarla entonces una forma de sexualidad demasiado íntima y cercana a las relaciones de hombre-mujer, este sexo alterno se fue retomando y definiendo como principio de un encuentro, de la práctica se pasó a la sesión y con ello a las reglas y normas de seguridad junto al Código de Silencio que va a permanecer entre los Leather hasta la década de 1970. Otro motivo de dicha relación entre Leather y SM fue que hasta antes de la Revolución Sexual las relaciones entre hombres Leather tomaban el principio de igualdad, no podía haber un hombre masculino y otro femenino, así que en un ambiente sin palabras ni términos no había espacio para una relación específica que condujera a la pareja, tampoco tenía lugar para celos, pasiones ni sentimientos encontrados, lo que actualmente conocemos como sexo casual tenía ya entonces un motivo de ser, al menos entre hombres.

En los años 80 fue la aparición del SIDA y el cambio generacional de los Leather lo que fue abriendo el medio, una cultura subterránea en medio de la concientización por los derechos plenos de las minorías sexuales hicieron que estos hombres que gustaban de los hombres se integraran al cambio que se estaba dando, no pocos se sintieron incómodos al ver sus lugares de reunión frecuentados por hombres que tomaban lo festivo del movimiento como forma de vida y de hacer presencia política y social, el entendimiento de que se podía llegar al mismo punto de la coexistencia social significaba que se podía ser parte y mantener a un mismo tiempo la identidad Leather, ya no eran lugares exclusivos, pero el Leather sabía crear su espacio y ambiente propio sin importar que tanto había cambiado la concurrencia que los rodeaba, al principio los Leather se encontraban entre otros hombres, casi siempre motociclistas, obreros, militares y policías, compartiendo espacios con travestis y marinos, que no siempre estaban a la búsqueda de encuentros con otros hombres, habían aparecido además los grupos y círculos de Sadomasoquismo heterosexuales con prácticas parecidas pero en la relación del Intercambio Erótico del Poder, los más jóvenes eran ajenos a la Vieja Guardia y experimentaban también con otros materiales y protocolos, aparece el gusto por el látex, el plástico y los materiales sintéticos, en el cine la última película que había tomado al homosexual como víctima/victimario de los temores comunes de buscar sexo casual se había estrenado en 1980, Cruising con Al Pacino haciendo de un policía encubierto que buscaba a un homicida dentro del medio Leather ahora es considerado un clásico por su escenas homoeróticas, el trabajo gráfico de Tom of Finland en sus historietas de corte pornográfico habían idealizado al hombre Leather en su expresión de búsqueda, sin emociones o sentimientos por alguien, siempre enfundado en uniforme, cuero o en mezclilla, haciendo varias prácticas y asumiéndose como parte de la Cultura Leather y permeando a la Cultura Gay, la gente se familiarizó con el concepto, ya no hubo espacio para permanecer en el anonimato y antes que otro lo fuera a tomar para su propio beneficio el Leather se presenta y hace una vida alterna, con prácticas, protocolos y Códigos como otra expresión de la naciente Diversidad.

Entre los muchos paralelismos que hubo la Cultura Leather dejó ver diversos aspectos que la formaban en diversos íconos de la cultura popular desde mediados del siglo XX, el rechazo a los convencionalismos y su búsqueda de identidad se deja ver en El Salvaje con Marlon Brando y su clásica boina y chamarra de cuero, James Dean como el Rebelde sin Causa, hacia los 70 cuando en el Heavy Metal busca una imagen y pasa de ser un movimiento en los bares de Birmingham a llamar la atención del público británico fue idea de Robert Halford, vocalista de Judas Priest, que decide integrar a su imagen el cuero y los estoperoles, una motocicleta y un látigo, había creado un estilo de rock solo de hombres retomando sus orígenes en los bares Leather.

En México el movimiento Leather se vio, como el resto de la Diversidad y otros movimientos contestatarios, de alguna forma obligado a hacerse público, la gente Leather había practicado, conocido y asumido su identidad por medio del contacto con la escena Leather de San Francisco, Los Ángeles y Nueva York, pero no había considerado enseñar sus prácticas y protocolos a otros hombres en nuestro país, había pasado con los hippies y otros movimientos que fueron tomados como modas en su momento, pero la necesidad de permanecer y dejar un legado hizo que a partir de los años 90 los Leather se hicieran presentes en Marchas y manifestaciones como un contrapeso ante la expansión del glamour gay, se tomó un lugar entre los demás, se dio una imagen pública y los interesados encontraron un lugar donde ser y estar entre otros hombres como iguales.

Desde el años 2000 hubo diversos cambios en las actividades y gustos de la Cultura Leather, en México no pasamos por la experimentación de otras formas de relacionarnos, asumimos los retos de conservar una identidad al mismo tiempo de pertenecer a la Diversidad Sexual, hubo un periodo que pedía ir formando nuevos seguidores y amigos Leather, hermanarnos y conservar las costumbres, además de crear los medios para transmitir lo que habíamos aprendido a los recién llegados, los medios electrónicos había derribado la frontera del aislamiento cultural, todo iba subiendo a la red y con ello prácticas, fetiches, gustos y aficiones alternas se fueron conociendo, discutiendo y ampliando; había terminado la era de los acuerdos, colores y lenguajes sin palabras, ahora era tiempo de aclarar que sí y que no eran las cosas, se fue creando un lenguaje universal y un entendimiento claro de lo que se busca siendo Leather.


La generación actual va conociendo los orígenes del movimiento Leather, su contexto en los ya lejanos años de 1950, recuperó el Código de Pañuelos, los Colores, los Uniformes, las relaciones y juegos de poder, el gusto por usar el cuero como símbolo de ser hombre y ante todo el sentir que el Orgullo Leather existe mientras haya hombres que se relacionen en su forma original: en igualdad y en libertad.


Gerardo Spíndola

Comunidad Leather México

Moderador


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para Revista Homópolis


Yo, Leather.009

Publicado por Gerardo.spin en 15:00 0 Comments

Colores y prácticas: el Código de Pañuelos


Pensemos en un tiempo en que la sexualidad no era un tema abierto, no había información acerca del comportamiento sexual y el común de la gente asumía que la reproducción era la finalidad de un encuentro sexual. La sensualidad era algo tabú, aunque se le consideraba algo exquisito y refinado a principios del siglo XX, en apenas 50 años era tomado por decadente; el placer se buscaba en la clandestinidad, sin palabras ni matices, para muchos era algo que no tenía valor, se pagaba por tener sexo y se reducía a una mera transacción monetaria.


A mediados del siglo XX, los primeros Leather se mezclaban con los grupos de hombres que ya existían, obreros, leñadores, pescadores, marinos, policías, militares; dentro de los mismos lugares de encuentro, bares, cantinas, puertos, callejones; era su lugar “natural” donde se podían encontrar al tipo de hombre que cubriera esa actitud de igualdad. La clandestinidad y el completo anonimato donde la medición de distintas fuerzas creaban un ambiente seguro para quien lo conocía, era peligroso hacer público el deseo sexual o la preferencia, incluso entre hombres afines, había que mantener distancia, la conducta ayudaba a reunir a los hombres que querían un acercamiento sexual entre ellos, por medio de diversos códigos se daba a entender la postura (sexo convencional o “vainilla”, juegos eróticos, sexo fuerte o prácticas de Sadomasoquismo) y las condiciones para dicho acto (rol activo o pasivo, lugar público o privado, uno a uno, parejas o grupos); mucho antes de que existieran los ligues el “cazar” a alguien y llegar a un contacto era considerado un encuentro.

Este lenguaje sin palabras se fue haciendo de conocimiento general entre homosexuales adultos, para 1970 se había definido que llevar una banda de cuero en la muñeca izquierda indicaba un rol Activo y el derecho el pasivo, no siempre referido al rol sexual, las llaves indicaban un encuentro en un hotel y no en la trastienda de un bar o un callejón, la gorra y los guantes eran obligatorios para los que tenían roles de poder como los amos, la playera blanca de los esclavos, el Dominio y la Sumisión en una práctica erótica o sadomasoquista se indicaba con el pañuelo en el bolsillo trasero de los jeans, los hombres se acercaban y conversaban de cualquier tema, pero nunca se tenía una solo referencia al sexo, la preferencia o las relaciones entre ellos, eran compañeros, no había la mínima mención a una relación afectiva o de pareja, se respetaba que eso se dejaran en la vida privada, en el actuar entre hombres el contexto era la igualdad y el compañerismo; también indicando así el respeto a los hombre no homosexuales que frecuentaban los mismos espacios, se conocían más nunca se mezclaban.

El sostener una postura de inconformidad ante el sexo tradicional junto a una actitud “kinky” o mórbida de la sexualidad, hizo que muchas prácticas o comportamientos sexuales se fueran incorporando a esta lista de opciones, se les simbolizó relacionándolas con un color determinado de un pañuelo, por lo regular cada comunidad tomaba en especial una lista no mayor de seis colores para prácticas generales e incluía la actitud para quien buscaba lo que fuera, quería solo ver o iba en un plan de hacer amigos, en algunos lugares se incluyeron preferencias raciales, prácticas de riesgo y las reglas para los recién llegados, hacia finales del siglo XX ya había listas de más de 50 colores y texturas para casi todas las prácticas del SM, el fetichismo y los gustos eróticos, sin embargo, la falta de practicidad hizo que nunca hubiera un consenso o lista oficial de colores y prácticas.

En tiempos recientes el pañuelo que indicaba que un hombre gustaba de la sexualidad alterna se volvió moda, los jóvenes llevaban pañuelos de manera indistinta si se era homosexual o no, las mujeres siguieron el ejemplo, los colores se usaron por gusto, las prácticas eras desconocidas, igual que los sitios de hombres y el Ambiente Leather se integró al contexto Gay.

Con la llegada de los medios electrónicos, la red, una mayor apertura hacia la información y una sexualidad más abierta desde el Movimiento en pro de los Derechos de las Minorías Sexuales, el Código de Pañuelos se convirtió más en una identificación entre hombres que gustan de una sexualidad alterna, las prácticas ya tenían nombre, se conocían sus alcances y limitaciones, ante las nuevas generaciones de hombres homosexuales, que ya vivían su sexualidad como algo abierto, se formó cierto pudor ante la idea de una sexualidad relacionada con el dolor, la clandestinidad y la aparente falta de apego, para las generaciones anteriores la prioridad era mantener la identidad, las nuevas buscaban otro reconocimiento y la relación de pareja yo era una opción y no un ideal.


Pocos hombres homosexuales siguen usando el pañuelo como medio de identidad o para buscar un encuentro, los hombres Leather lo usan como forma de identificarse entre ellos y como parte de expresar el Orgullo Leather, el contexto ahora está mas relacionado a indicar que un hombre tiene preferencia por prácticas de Sexo Rudo o es Sadomasoquista, otros hombres se acercan y preguntan directamente que prácticas les gustan y si pueden participar o conocer de las mismas, los colores ahora forman parte de la ropa de cuero o mezclilla, pues el ambiente Leather ya no es rigurosamente de cuero negro, curiosamente, ante la idea de que se ha superado esa postura de la Clandestinidad, un hombre Leather puede entrar a un bar o sitio Gay, se da a notar, pero solo otro Leather entiende lo que busca, pues lo reconoce en la actitud y sobre todo en el color y el lugar donde se lleva un pañuelo, algo que solo ellos reconocen y saben que significa.


De entre las Prácticas más comunes se pueden identificar unos cuantos colores básicos relacionados al pañuelo, algunas texturas y objetos:


(Izquierdo=Dominante, Derecho=sumiso)

Rojo: fisting

Negro: Leather fetish o Leather Master/slave

Gris: Bondage

Amarillo: Water Sports o lluvia dorada

Azul: uniformados y policías

Llaves en bolsillo trasero: tengo o llévame a tu lugar

Llaves en bolsillo delantero: en mi/tu auto


Toda práctica debe ser realizada bajo Contacto Seguro, Protegido, Negociado y atendiendo al Código de Prácticas: en lo Sano, Seguro y Consensuado.


Gerardo Spíndola Hurtado
Comunidad Leather México
Moderador


Para Revista Pink, diciembre 2010, año 1, número 3, páginas: 16 y 17
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Preludio (PARTE 1)


Antecedentes


El término “relato íntimo” es lo más cercano que encuentro para iniciar esta serie, sin ser biografía, ficción literaria o el mero deseo de dejar correr libremente mis pensamientos, lo que busco aquí es explicarme a mi lo que he encontrado en el camino y me ha llevado a estar justo donde estoy, sin hacer de lo anterior una declaración de indefensa postura ante lo que sucede o mero observador de los cambios en los que he decidido participar, simplemente es algo que quiero compartir, como acostumbro, sin esperar esas extrañas y no solicitadas interpretaciones de lo que, a otros ojos, es mi personalidad (“eres un soñador” me dijo un compañero por sugerir que él tenía capacidad de convertir su fuerza en dominio bajo el entrenamiento correcto) , tampoco es hacer una imposición de mis ideales, posturas y diálogos construidos desde mi perspectiva del “mundo real” (mi mundo íntimo, pues todo lo exterior es tan subjetivo por depender de cómo decidimos darle importancia y significado pero nunca engañado en la idea de que por ser subjetivo no existe o no tiene importancia, ya vi a alguien perderse en esa interioridad y volver al mundo mentira y a su demencia única respuesta); no, realmente es algo más sencillo y me gusta la idea de compartir esto con quien quiera leerlo, pues mi postura ha sido desde hace tiempo, que la última respuesta es de quien me lee y no la mía.


Antes de dar inicio a mis actividades de este año dentro de la Cultura Leather que me corresponde, quiero referir algunas cosas que han pasado, sin dar orden específico, prioridad, cuantitividad o algún otro medio de contar las cosas, simplemente, que están presentes ahora.


Sitios en la red:


La forma más poderosa de expresión, sitio de intercambio de la nueva ágora, donde todo es posible de expresar y encontrar alguna respuesta, nació la Comunidad Leather México como algo virtual y es ahí donde sigue su postura y fuerza, a tiempo quitando elementos que no tienen sentido más que dentro de los egos heridos y la inferioridad emocional de más de uno, quité la palabra webmaster, término de ser simplemente un superusuario que controla un sitio bajo sus criterios y tomé la vieja regla de la meritocracia, mientras me sea posible hablar con alguna razón de mi parte y se me requiera aquí estaré, sin ser más ni menos a otros y tomando en cuenta que puedo ayudar porque me gusta atender a quien busca se le enseñe.

  • Yahoo grupos: donde inició todo, basados en la idea de poner todo al alcance de los que forman una comunidad y sean sus miembros los que intercambien libremente ideas, algunas veces repitiendo esquemas de hacer señalamientos, ofensas y tomando a personal algunos contextos, pero necesarios estos ensayos de la soberbia para dejar espacio a las ideas inteligentes que algunos expresan, comparten y aluden al verdadero sentir de tener un espacio así, libre, autoregulado y formado por gente adulta, ha pasado ya tiempo que los grupos y foros de opinión tuvieron su auge, pero mantiene el grupo su cohesión dentro de un espacio como este antes de caer en la mera generación de consensos. (355 miembros, dos refundaciones, referencia principal para presentarse, buscar y encontrar información, encontrar nuevas ideas, revalorar las antiguas, filtrar elementos ajenos y punto de encuentros reales).

http://mx.groups.yahoo.com/group/comunidadleathermexico/


  • Facebook páginas: buscar dentro de las redes sociales el compartir lo inmediato, otro poderoso filtro ante necedades o problemas para abrir el diálogo.

http://www.facebook.com/pages/Mexico-City-Mexico/Comunidad-Leather-Mexico/372215498789

  • Facebook grupos: buscando información de nuestras actividades, satisfaciendo curiosidades donde muchos que no asumen su postura como homosexuales encuentran otro modo de ver la Diversidad.

http://www.facebook.com/group.php?gid=258674166577


Blogs:


¿Qué puedo agregar? Es tanto lo que queremos compartir y encontrar estos espacios nos abrió un interesante frente de opinión, referido en varios sitios sobre Fetichismo, SM, B. D. S. M. y donde se comparte el Otro lado de la Diversidad.


  • Comunidad: un promedio de mil entradas por semana, buscando complacer gustos distintos con un interés común.

http://comunidadleathermexico.blogspot.com/


  • Yo, Leather: aprender de los errores los vuelven éxitos, un tanto descuidado a veces por buscar un seguimiento a todo lo que se publica en sitios de terceros(*) que nos han pedido colaborar con la forma más poderosa de expresión: la palabra.

http://yoleather.blogspot.com/


  • Radio Leather México (**): nació de la idea de tener un espacio para hablar “en Leather”, todos los podcast que se han generado de Jueves a las 10 y otros proyectos.

http://radioleathermexico.blogspot.com/


Medios:


  • (*) Revista Pink: concepto creado por nuestro amigo Gabo Alarcón buscando una expresión diferente (yo diría real) de la Comunidad Gay en la Ciudad de México, nos invitaron a exponer ideas distintas y difundir información de una Cultura Leather real, humana y actual.

http://revistapink.net/


  • Punto P y Punto: hablar hacia la Diversidad de ella misma es asumir más que simples conceptos, invitación hecha por Radio Mente Abierta a acompañar a un integrante de IMESEX, nuestro amigo Jonathan Altamirano. (miércoles 8:30 p.m.)

http://www.radiomenteabierta.com/diversidad/


  • (**) Jueves a las 10: volviendo a su hogar, la sede de la Comunidad Leather México, tras su paso por una emisora que desapareció y por www.canalg.tv que nos ha pedido una serie independiente de y para la Diversidad. (jueves de 10 a 12 p.m.)

http://radioleathermexico.listen2myradio.com/


En parte parece más un resumen de la Egoteca, pero nada de lo anterior existiría sin el interés de la gente Leather, los fetichistas, el resto de la Diversidad y el público en general que busca esta información, en la siguiente parte referiré a la Comunidad en las fraternidades, el espacio fuera de lo virtual, algunos fracasos, grandes éxitos y sobre todo, lecciones de vida.


Enero de 2011.


Gerardo Spíndola Hurtado

Comunidad Leather México

Moderador


comunidadleathermexico@gmail.com